Se nos ha ido un mito del Soul, puede que extraño y maldito, en parte. Espero que los jovenzuelos que estuvieron hace tres días con sus Satánicas Majestades escuchen hoy algún tema en honor de una de las influencias reconocidas e innegables de los incombustibles a los que veneran. Sería algo así como justicia poética para el Poeta.